~~~ oOo ~~~
El Ateneo Obrero cumplió el 12 de agosto del año pasado 125 años de historia. Para conmemorar esa fecha, la comisión organizadora del aniversario realizó un arduo trabajo de investigación histórica que se plasmó en la exposición que ayer quedó inaugurada en el Ateneo de La Calzada con una visita guiada a cargo de Boni Ortiz. A lo largo de sus más de cien años de historia, esta emblemática institución gijonesa ha logrado sobrevivir a gobiernos de izquierdas y de derechas, a cinco ubicaciones diferentes y hasta a una expropiación franquista. Todo ello y mucho más se ha resumido en los 20 paneles de los que consta la muestra. Además hay otros cuatro en los que se reproducen las contraportadas de algunos libros dedicados por escritores de la talla de Blasco Ibáñez, Ortega y Gasset, Pío Baroja y Pérez Galdós.
«Desde la exposición del año pasado hasta ésta, no hemos realizado ninguna más, pero tenemos la intención de llevarla por diferentes puntos de Asturias», explicó ayer Boni Ortiz momentos antes de la inauguración.
En la apertura de la muestra, Ortiz, miembro de la ejecutiva del Ateneo y comisario de la exposición, recordó los orígenes de la entidad. «El Ateneo nació en 1981 gracias al respaldo de la burguesía liberal gijonesa y con Eladio Carreño a la cabeza, con el fin de instruir a las clases obreras». El grupo de oyentes crecía tímidamente y Ortiz continuaba desgranando la historia ateneísta: «En 1920 gracias, entre otros, a Fernando García Vela, el Ateneo se proyecta más a la ciudad. Es en estos años cuando vive su mayor esplendor. Una época dorada que finaliza en 1937». Durante estos años, muchas fueron las anécdotas vividas por esta institución. Ortiz las refrescó ayer apoyándose en los textos y fotografías expuestos. «En aquella época, había un grupo de naturismo que hacía giras a la playa de Aboño. En 1935, una revista editada en Valencia llamada Heros sacó un número especial sobre el nudismo en Asturias».
Otra de las anécdotas de ese periodo ocurrió durante la Revolución del 34, según cuenta Ortiz, «el buque 'Libertad' tiró un cañonazo al Ateneo que de aquella estaba en la calle de Ezcurdia y todo quedó hecho polvo menos los cuadros de José Gutiérrez Solana que estaban expuestos y quedaron intactos».
En la exposición llama la atención una foto en la que, en lugar de la estatua de Pelayo en la plaza del Marqués, se ve sobre en el pedestal la figura de Rosario de Acuña. «Es un fotomontaje que realizamos en recuerdo a cuando, en el año 36, al alcalde anarquista Avelino González Mallada, le faltó muy poco para hacerle una escultura a la insigne ateneísta a partir de la fundición de la estatua de Pelayo y campanas de varias iglesias».
Esta época cargada de anécdotas contadas con maestría por el comisario de la exposición termina cuando, con motivo de la contienda civil, sus bienes fueron incautados y se prohibió la actividad pública. Ortiz recordó cómo tras «el largo paréntesis de la dictadura, Daniel Palacio inicia el proceso de recuperación en 1981 que se consolida con la apertura de un nuevo local en 1985 en la calle de Covadonga», actual sede de la entidad.
Recuerdos
Los recuerdos afloran con las palabras del comisario de la exposición, pero también con las fotografías. Verlas ha supuesto para Luis Fernández recordar los edificios que albergaron las antiguas sedes y que ya no están. Es tan completa que algunos, como Jorge Pérez, comentan que volverán otro día para verla con más detalle. Todo el que lo desee podrá hacerlo hasta su clausura, el próximo 13 de octubre.
Más información en
http://www.elcomerciodigital.com/gijon/20070925/gijon/anos-vistazo-20070925.html
~~~ oOo ~~~
No hay comentarios:
Publicar un comentario